En un artículo anterior os hablamos sobre la importancia y el peso que están adquiriendo los vídeos en el mundo del marketing. Este artículo podríamos considerarlo como una continuación del mismo, pero en este caso, queremos compartir con vosotros los errores que hay que evitar con esta clase de contenido multimedia.
Errores en los que no hay que caer en la creación de vídeos
Lo visual es lo primero que nos entra, eso es cierto, pero… ¿solo se debe tener en cuenta ese aspecto? ¿De qué vale tener un vídeo con una puesta en escena fantástica si el contenido no es de valor? En este caso, el vídeo se queda cojo. Hay que plantearse que tanto si el vídeo es corporativo como si se va a incluir en una estrategia de marketing, debe ser de calidad.
Debe tener punch desde el primer momento y antes de los 10 primeros segundos debe haber captado la atención del target al que está destinado. Todo tiene que estar medido y controlado desde el primer momento. Guión, iluminación, color, contenido, postproducción… todos los detalles deben estar cuidados al máximo.
Uno de los errores más comunes es la duración de los vídeos. Si es demasiado largo, el público perderá interés. En este caso, debe tener todos los detalles medidos, incluida su duración, Que sea demasiado largo no hará que el público se interese mas sino que puede producirse el efecto contrario.
La postproducción no debe eclipsar nunca al producto, marca o servicio, que debe ser el protagonista. Esto hace que el espectador ponga su atención en algo que no es lo que se ha planeado desde el principio.
Video blogs, un arma de doble filo
Los video blogs o vlogs, como se conocen normalmente, son muy utilizados hoy en día. En ellos, un representante de la marca habla directamente frente a la cámara. Esto es formidable por varias razones, una de ellas es porque humaniza a la marca y la hace más transparente. Hay que aprovechar esta baza y hacerlo bien porque son una herramienta muy potente.
El hecho de que una marca ofrezca a sus clientes y clientes potenciales un video blog es fantástico. No solo humaniza la marca sino que consigue la fidelización en muchos casos. Para evitar que salga mal, no solo hay que tener cuidado del guión sino de otros aspectos. Un buen enfoque, iluminación y sonido deben ser la columna vertebral del vídeo, al menos en cuanto a aspectos técnicos se refiere.
Hay vídeos en Internet en los que no se han cuidado estos detalles y no se trata de contenido grabado por cualquier persona sino por empresas. Dejar que esto ocurra no dará buena imagen a quien lo está viendo y quien lo vea pensará que no hay profesionalidad y que la empresa no es algo serio.
Aspectos prohibidos en un vídeo
Hay aspectos que jamás deben ser contenidos en los vídeos que se generen, como por ejemplo música de la que no se cuenten con los derechos o se haya pagado por su uso. Puede que guste mucho determinado tema y que encaje perfectamente en la producción, pero no se deben usar temas sin permiso.
No solo no se dará buena imagen sino que puede llegar a haber fuertes sanciones económicas. Lo mismo sucede con fotografías, vídeos o cualquier otro aspecto que pueda estar protegido por los derechos de autor-
Aunque es una tendencia, no se debe poner un título del estilo clickbait porque sería como estar engañando al público. Consiste en mostrar un título que resulte impactante o muy ambiguo para conseguir llamar la atención y después el vídeo tiene poco o nada que ver. Eso hace que los espectadores se sientan engañados.
Si quieres crear contenido multimedia de calidad en los que todos los detalles estén cuidados, confía en nosotros. En Tangram nos involucramos en cada proyecto como si fuera nuestro, para ayudarte a conseguir tus objetivos.