La preservación de la memoria corporativa es algo muy importante para cualquier entidad o marca. Aunque en un principio pueda parecer algo que no tiene demasiada relevancia para personas ajenas a una empresa, lo cierto es que tiene una gran importancia porque se mantiene vivo el origen de la empresa.
¿Qué beneficios aporta una memoria corporativa?
Uno de los beneficios principales que tiene contar con una memoria corporativa es que se conocen de primera mano todos los detalles del nacimiento de la empresa, algunos o todos los retos a los que se ha enfrentado desde su fundación así como errores cometidos.
Es muy importante que los datos sean accesibles para todo el mundo dado que esto puede favorecer la confianza de los clientes potenciales y ayuda a aumentar la presencia en el nicho de mercado en el que se mueva la empresa, independientemente del gremio al que pertenezca.
Es necesario recordar que una empresa que mantiene viva la memoria corporativa, facilita el acceso a información relevante de manera dinámica y ágil acerca de la empresa, pero también de la época en la que se fundó, por ejemplo. De esta forma se puede construir un escenario más completo.
Tips para preservar la memoria corporativa de la empresa
No se trata de juntar todos los papeles relevantes y fotos o vídeos antiguos sino que lo que se busca es preservar un patrimonio, la historia de la empresa. Por ello es necesaria una planificación exhaustiva y realizar un trabajo en profundidad.
Además hay que elegir un medio que esté de acuerdo con las preferencias del público al que está dirigido nuestra marca. No vale de nada crear un libro fantástico si el grueso de los clientes se encuentra en Internet. Hay que estudiar bien este aspecto antes de ponerse manos a la obra.
Para divulgar la memoria corporativa es posible elegir entre varias plataformas o medios. Ahora, con el crecimiento de la tecnología, los medios más tradicionales han dejado espacio a otros que son más rápidos, accesibles, dinámicos e interactivos. A pesar de ello os proporcionamos algunas ideas sobre donde plasmar la memoria corporativa.
Una de ellas es la más clásica, un libro. En él se pueden contar historias acompañadas de muchas fotografías. Es un buen método, aunque no es muy utilizado por muchas empresas quienes apuestan por los soportes digitales.
Tener la memoria corporativa en Internet permite un acceso mucho más rápido y global. Hoy en día son muchas empresas las que tienen zonas en sus webs donde nos cuentan su historia, sus primeros pasos, errores, logros, etc. Además es muy común poder encontrar cronologías como si se tratase de una línea de tiempo en la que podemos ver todos los detalles según periodos.
Dos casos de empresas en las que se muestra su memoria histórica los encontramos en Toyota, donde cuentan con el Toyota Automobile Museum donde nos muestran su impresionante riqueza histórica. Lo mismo sucede con Samsung y su museo, el Samsung Innovation Museum, donde podemos conocer la historia de la compañía y cómo fue creciendo hasta convertirse en lo que es hoy en día.