En Tangram pensamos que las estrategias de marketing digital y tradicional deberían ir de la mano, porque proyectan la imagen de la empresa, marca o producto. Si cada una va por su lado, se están lanzando mensajes contradictorios a quienes lo reciben. Entender esto supone ir más allá y asegurarse de que nuestra marca está transmitiendo un mensaje consistente, con independencia del medio usado (ya sea campaña web, en redes sociales, móvil o impresa). Trabajar de esta forma amplifica el impacto de las acciones de marketing: además de la aportación que realiza cada canal, las campañas y estrategias se impulsan unas a otras a través de los diferentes canales, reforzando la imagen de marca.
El marketing digital desarrollado a través de Internet segmenta muy bien, satisface la necesidad del posible cliente al momento, nos ofrece mucha información y la posibilidad de establecer una comunicación además de permitirnos contar de manera ilimitada todo lo que hacemos. Pero… no crea la conciencia de marca ni el posicionamiento en la short-list de productos del cliente que las acciones del marketing tradicional ofrece. Si lo que necesitamos es incrementar las ventas nada como el correo directo o las relaciones públicas o la publicidad impresa o los programas de fidelización que el marketing tradicional ofrece.
Claramente el marketing digital es menos costoso y de ahí su rápida expansión y el crecimiento en número de usuarios. Bienvenido por tanto en la medida que ha permitido que las pequeñas economías accedan al mercado y a los consumidores. Sin embargo para optimizar al máximo nuestra estrategia de marketing y sobre todo si nuestra empresa se lo puede permitir económicamente, lo recomendable es establecer un plan que combine lo mejor de ambos mundos.
A no mucho tardar (si es que no está pasando ya…) consideraremos un “lujo” recibir una invitación en papel. Sí, podemos leer libros en formato digital… pero ese libro entre las manos, debajo de la sombrilla… no tiene precio. Luego si eso, podemos compartir por redes sociales lo bueno que es.
