Realizar una auditoría visual de marca es algo muy común en nuestros días y el objetivo no es otro que conocer cuál es la situación real de determinada marca frente a clientes y consumidores. Con una auditoría de marca se puede conocer también si el posicionamiento que se busca ha sido conseguido así como la imagen de la marca respecto a los competidores.
Con la realización de una auditoría visual de marca, además de conocer los puntos antes citados, son muy útiles porque permiten adoptar las estrategias exactas que deben seguirse para poder conseguir los objetivos buscados a la hora de realizar el desarrollo de la estrategia.
Con una auditoría visual de marca también se estudia la identidad de marca, lenguaje visual y todos los elementos gráficos que se hayan utilizado para proyectar la marca, independientemente de la plataforma que se haya utilizado. Además, dentro de la auditoría visual de marca podemos destacar cuatro puntos de gran importancia: la imagen interna, imagen comercial, imagen financiera y la imagen pública.
Un primer paso dentro de una auditoría visual de marca es un profundo análisis sobre la evolución histórica de la empresa, su eslogan, nombre, logotipo, emblemas, se realiza una evaluación de la identidad visual en todos los elementos de trabajo y comunicación, todo lo relacionado con la imagen pública, financiera y comercial, conocer al valor el producto, servicio al cliente y valor de las marcas entre otros aspectos.
En un segundo paso puede realizarse la unificación de la marca, con la implementación del manual de identidad corporativa o libro de estilo si se necesita, se analiza la comunicación interna, todo lo relacionado con webs, blogs, redes sociales, etc. Otros apartados importantes en la unificación de marca también nos llevarán a controlar las promociones y la publicidad, la personalización de la comunicación y todos los canales de comunicación para llegar de una forma homogénea.
En este proceso no podemos olvidarnos de algo tan importante como asegurarnos que la identidad corporativa que estamos proyectando responde correctamente a aquella imagen que percibe cada uno de los targets seleccionados.
En definitiva, no hay que dejar de lado la oportunidad de realizar una auditoría visual de marca siempre que se tenga la oportunidad. De esta forma podemos llegar a conocer cuáles son los puntos fuertes y débiles de la imagen corporativa y poder obrar en consecuencia para mejorar algo tan importante como es la imagen de la marca.
