La curiosidad es una de las características del ser humano y las ganas por saber son algo innato en nosotros, ya no solo para obtener una buena formación sino para cualquier otro ámbito. Por ejemplo, en la década de los ochenta, una de las más recordadas de la televisión en España, comenzaron a llegar grandes producciones norteamericanas que arrasaron en la pantalla.
Una importante producción, Dallas para ser más exacto, incluyó en sus capítulos lo que se en el argot televisivo se llama cliffhanger, que consiste en hacer que un episodio finalice sin mostrar un desenlace y encadenándolo para la siguiente entrega mediante un avance de lo que se vería en el siguiente episodio, lo que hacía que los espectadores tuviesen que continuar viendo la serie para descubrir lo que verdaderamente ocurría. Tras ese éxito muchas otras series adoptaron este formato, algo muy común en nuestros días incluso en las campañas de publicidad, las cuales no están exentas de este efecto, aunque ya no se llama cliffhanger sino teaser.
¿Qué es una campaña teaser?
Puede que por su nombre no os suenen demasiado pero seguro que las habéis visto en infinidad de ocasiones en diferentes plataformas. La palabra anglosajona teaser quiere decir rompecabezas y una campaña de estas características consiste en despertar esa curiosidad de la que os hablábamos al principio de esta entrada, pudiendo ser usada en televisión, radio, cartelería, etc.
¿Cómo se consigue? En esta acción publicitaria no se revela ni la marca de la compañía ni el nombre del producto, pero sí se dan algunas pistas como el uso de colores corporativos, una tipografía específica, una voz en off característica o cualquier otro elemento que guarde relación pero que no dé a entender, al menos a primera vista, de qué se trata, con lo que se consigue despertar la curiosidad del público objetivo.
¿Cuándo suele usarse una campaña teaser?
Principalmente se usa para un lanzamiento de producto o cuando comienza una nueva campaña de temporada por ejemplo. El timeline de la campaña se va segmentando en diferentes lapsos para ir creando esa intriga entre el público y finalmente se muestra el producto y la marca, bien sea en un desenlace o encadenando todos o parte de los segmentos anteriores. Esta clase de campañas pueden ser usadas en diferentes medios, pudiendo comenzarse en publicidad exterior o mupis y acabando en televisión por ejemplo, consiguiendo un efecto de mayor alcance.
Casos de éxito
Son muchos casos de éxito los que podríamos contar aunque uno de los más conocidos de los últimos años ocurrió en Estados Unidos, pocos días antes del lanzamiento del juego Grand Theft Auto IV, donde en muchos puntos de las principales ciudades se puso el clásico cartel de “Se busca” con uno de los protagonistas de este videojuego, haciendo creer a muchas personas que realmente se trataba de un prófugo y no de un entretenimiento.
En España, este mismo año, Vueling preparó una campaña teaser para su promoción de Vueling Day mediante diferentes un diseño gráfico donde no se veía nada más que un fondo amarillo, el logo de la empresa y a una chica con un altavoz y una nube bajo el brazo. Poco a poco fue revelando el misterio y supo aprovecharse bien de su estrategia porque para participar en su campaña veraniega, donde regalaron vuelos a cinco personas cada hora, había que ser seguidor de VuelingPeople en Facebook. En menos de diez horas se alcanzaron más de 47.000 nuevos usuarios, que sin duda habrán colaborado a viralizar aún más esta campaña.
